Color granate intenso, brillante y de capa alta. Destaca un aroma envolvente y profundo en el que predominan: las frutas silvestres, las especias, el bombón inglés y notas balsámicas y minerales; arropadas por tostados procedentes de su crianza de 23 meses en barricas nuevas de roble francés de Allier. En boca es delicioso, amplio, con un tanino redondo y persistente. Dalmau se caracteriza por ser un vino de finca, carnoso, complejo e intenso, pero en el que la elegancia juega como elemento diferenciador y seña de identidad de la bodega.